Los Sistemas de Alerta Temprana Comunitarios SATC- surgen como una iniciativa ciudadana en el año 2015 en el
corregimiento San Antonio de Prado, zona rural del municipio de Medellín, ante la necesidad de prepararse
por una posible materialización de inundaciones por las quebradas de afluencia. Convirtiéndose por sus
resultado en un proceso fundamental del SIATA, proyecto de ciencia y tecnología para la gestión de riesgos.
Los SATC son estrategias territoriales que reconocen al ciudadano como protagonista de la gestión del
riesgo. En este sentido SIATA se vincula como herramienta para entregar información oportuna y eficaz a
comunidades en situación de vulnerabilidad. Así de la mano de los organismos gestores de riesgos aportar al
fortalecimiento de habilidades y capacidades de respuesta en miras de reducir la posibilidad de daño
personal, pérdida de vidas, daños a la propiedad y al ambiente ante una amenaza o evento adverso que puede
desencadenar situaciones potencialmente peligrosas.
Desde esta mirada se co-construyen conocimientos entre las comunidades y el equipo científico del SIATA,
afianzando un intercambio de saberes que favorece la resiliencia y la preparación de la sociedad ante la
materialización de eventos de desastres, con comunidades informadas, formadas y empoderadas. Para esto se
realiza levantamiento de información con la comunidad, que es contrastada con la modelación hidrológica e
hidráulica para conocer posibles escenarios, que permitan la consolidación del conocimiento del riesgo desde
una mirada interdisciplinar y del diálogo de saberes.
En el Valle funcionan actualmente 17 alarmas comunitarias para procesos de evacuación, como herramienta del
sistema de alerta temprana comunitario (SATC), y como apoyo dentro de los PCGRD - Planes Comunitarios de
Gestión de Riesgos de Desastres
¿Cómo se hace un pronóstico del estado del tiempo? ¿De dónde obtenemos la información?
En el SIATA realizamos el pronóstico del estado del tiempo basados en un modelo numérico meteorológico (WRF) que se ejecuta diariamente, el cual se complementa con información en tiempo real de la red de monitoreo hidrometeorológico instalada en el valle de Aburrá y sensores remotos.
Para dar cuenta de la variabilidad e incertidumbre de las variables atmosféricas involucradas en el pronóstico, ejecutamos seis configuraciones diferentes del modelo que nos permiten hacer un análisis de la probabilidad de ocurrencia de precipitación. Es por esto que los pronósticos de lluvia los publicamos como probabilidad de baja, media o alta.
Como las condiciones meteorológicas en el valle varían a lo largo del día, cada 6 horas realizamos una revisión de la información registrada por nuestros sensores remotos y de ser necesario un ajuste al pronóstico.
La información del pronóstico se brinda para cada ventana de tiempo
Madrugada 00:00 a 06:00
Mañana 06:00 a 12:00
Tarde 12:00 a 18:00
Noche 18:00 a 00:00
Es importante estar pendiente de los cambios que realicemos durante el día en nuestro pronóstico, ya que este puede variar dependiendo de las condiciones hidrometeorológicas de la región.
Un sismo es una serie de vibraciones en la corteza terrestre originado por liberación de energía en la tierra ocasionado por rupturas o movimientos de falla, subducción de placas tectónicas y actividad magmática principalmente.
La naturaleza de los sismos varían según el ambiente geodinámico en el que se encuentre una región, sobre Colombia convergen tres placas tectónicas (Nazca, Sudamérica y Caribe) y el bloque Panamá-Chocó, lo cual configura a nuestro país como una zona tectónicamente activa y compleja.
Colombia presenta un gran número de fallas en la zona de deformación originada por la actividad tectónica, conocida como los Andes del norte (consta de los sistemas montañosos de Ecuador y Colombia).
Los sismos pueden ser superficiales (menor a 30 km) o profundos (mayor a 30 km), los primeros son asociados principalmente a fallas presente en la superficie terrestre, mientras que los profundos son asociados a zonas de subducción (rupturas de la placa en profundidad).
Los sismos registrados en el valle de Aburrá en su mayoría están asociados a sistemas de fallas presente en el occidente y noroccidente del AMVA y a los nidos de Bucaramanga (% de los sismos vienen de esta zona) y viejo Caldas
Aunque no es posible realizar predicciones de cuándo ocurrirá un sismo, el monitoreo de estos permite establecer zonas donde existe mayor actividad sísmica; con lo que se modela la amenaza, vulnerabilidad y riesgo sísmico.
Actualmente el SIATA administra el Red Acelerográfica de Medellín y el Valle de Aburrá, la cual se compone de 26 estaciones activas con las cuales es monitoreada la actividad sísmica en el región. Los registros acelerográficos permiten medir, como su nombre lo indica, la aceleración que se registró en el suelo ante un sismo y esto está asociado a la intensidad del evento.
Los estudios de la aceleración del suelo o roca son usados para establecer normas sísmicas, para Colombia se ha realizado la norma sismo resistente del 2010 (NSR10). También es importante destacar la importancia que tiene una red de acelerógrafos al momento de ejecutar proyectos de microzonificación sísmicas (obligatorio para capitales departamentales y ciudades con más de 100,000 habitantes que se encuentren en zona de amenaza intermedia alta)
Aunque en el valle de Aburrá no haya registro de una gran afectación por parte de un evento sísmico (La Red Sismológica Nacional de Colombia se empezó a construir en 1993) Vale la pena recordar que nos encontramos en una zona compleja y activa desde el punto de vista geodinámico y que la actividad humana es muy pequeña en comparación a procesos geológicos recientes, que configura la geología actual del valle de Aburrá.
Cualquier duda o aporte recuerden que este grupo es también para el intercambio de información valiosa.